Por el camino de piedra
iré desgajando mi destino,
hermético troquel cenizo
en el día de la lluvia hiedra.
En los bordillos de piedra
iré a limar tu clandestino
y vacuo amor enfermizo
que mi vida hiere y merma.
Nuestro amor huyó vivo,
respiraba, cantaba como hiena
se acurrucaba en el bosque frío,
lo deje llorando en madre selva.
Ya nunca confío en ti,
para ti no existía,
negado tras de ti seguía,
despreciado y sin estima.
Horrorizado corrió a esconderse,
sin piedad, busco la muerte,
iré al bosque por el camino
a levantar su cadáver
a contar su suerte.
Comentarios