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adios

Adiós.
Adiós, fue un bonito sueño,
un distinto camino,
otro universo.
Por qué buscar de todo el código,
una flor nace y florece
mientras otra se pierde y es arrasada por el viento.
Un sueño bajo Orión, se marchita y perece, al frente las pesadillas a diario prevalecen.
Un amor termina en medio proceso, comprometido y en un suceso
se pierde,
otro sin salida,
sin futuro ni respuestas lo aplasta,
el mismo instante y en el mismo corazón.
Y que es la razón,
insulsa justificación y reconforte del cobarde que ha perdido sus hormonas, que necesita retroceder y su rostro retirar del fragor del porvenir.
Por qué tratar de pintar todo de gris, negar el color, de las lágrimas, del sudor, de la muerte y el sopor, del oscuro negro de sus ojos.
Por qué no simplemente vivir
sin entender,
sin aceptar que es una enfermedad, una malogración del cerebro extraviado
no disfrutar del misterio y hundirse en lo inexplicable.
Soñar, despertar, llorar, reír, amar, amar, amar,
con deseo, con dolor,
con el aroma suculento
del bosque de media noche
en medio del océano.
Amaru castelA.

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