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exilio

Solo al verte me excité y pensé
en los inmensos mundos 
de miel y veneno 
que llevas en los pechos,
en las piernas,
y al troquelado abismo, 
del gineceo móvil 
que tienes entre ellas, 
en tus óvulos, 
en tu falda de movimiento eterno,
de tus hombros, 
del vaivén de tu espalda.
Sentí el viento de tu pelo atravesarme las palmas, 
los mástiles, 
pistilos con ganas 
y sentí el aroma de tú cuello impregnarme las entrañas. 
Te vi medio segundo 
y se devasto mí calma, 
la locura de tu cama 
se rego por las cañadas, 
por canaletas sin lluvia 
fluyó tu agua 
e inundó el mundo tan seco de tus miradas.
La locura sin bragas, 
el cuerpo una llama, 
solo vi una mañana,
hace tantas noches malvadas,
hace tantas caricias charcas,
hace tantos besos fantasmas. 
blasfemos.
Solo te vi hace tanto, 
a pocos segundos de nada 
y me quede en abandono 
lejos de la vida,
 a dónde tus ojos nunca miran,
a dónde tu boca no succiona
 ni humedece,
 exiliado de tu amor.
Amaru castelA.

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