La tarde corre rosácea, toda la comunidad se encuentra ocupada en la celebración. Llego el aya marcay killa.
La gran procesión sube y baja las gradas a través de quebradas y senderos de la cancha sagrada, pasa cerca de las chozas.
En andas, amarcada, la momia del jatum soberano recorre la comarca. Luego en la plaza mayor come y bebe con su pueblo.
Muchas otras momias menos nobles llegan para acompañarla, han recorrido vestidas con sus mejores galas cada hogar, cada patio, luego de ser desenterradas.
Las personas que las llevan beben sangre de llama, comen coladas de maíz morado con sangre de pichón. Es una gran fiesta volver a compartir con los difuntos familiares.
Han pasado algunos siglos, hoy la gente amarca unas muñecas de pan, en forma de pequeños difuntos amortajados. Beben una colada de mora y mortiño, morada, con piña y fresas.
Sobre las antiguas piedras de la calle, en una mesa de vieja madera, la figura de un hombre decrépito descansa, la colada morada que bebe esta c
ECUADOR MILES DE AÑOS MILES DE LETRAS